Qué es el premio fangio
Fangio pasó sus últimos años como embajador del deporte. También fue entrenador de jóvenes pilotos. Murió de insuficiencia renal el 17 de julio de 1995 en un hospital de Buenos Aires. Fangio es tan recordado porque hizo lo que ningún piloto había hecho antes: elevar el automovilismo a una forma de arte. Al igual que un pintor acaricia un pincel, Fangio acariciaba sus coches, y el resultado era hermoso.
La mística que rodea a Fangio continúa hoy en día. Lo que le hace aún más legendario es el hecho de que no se le puede comparar con los pilotos de hoy en día porque los equipos y las pistas son incomparables. Lo único que queda es soñar con lo que el tranquilo y sosegado Fangio podría haber hecho con las máquinas de hoy.
En 1971, más de diez años después de su retirada del automovilismo -y cuando ya tenía más de 60 años-, Fangio se puso de nuevo al volante para rodar segmentos de una biografía cinematográfica titulada simplemente Fangio.
La película contiene imágenes originales de la carrera de Fangio, ofreciendo a quienes nunca vieron correr al maestro una visión de primera mano de su innata e inigualable capacidad de conducción. Sin embargo, no se han podido localizar los clips de algunas de las carreras de Fangio. Para rellenar los huecos, se filmaron recreaciones con Fangio conduciendo sus coches originales en circuitos como Mónaco, Monza en Italia, Reims en Francia y Silverstone en Inglaterra.
Coche Fangio
Juan Manuel Fangio (español de América: [ˈfanχjo], italiano: [ˈfandʒo]; 24 de junio de 1911 – 17 de julio de 1995),[2] apodado El Chueco o El Maestro, fue un piloto de carreras argentino. Dominó la primera década de las carreras de Fórmula 1, ganando el Campeonato Mundial de Pilotos en cinco ocasiones[3].
Desde niño, abandonó sus estudios para dedicarse a la mecánica de automóviles. En 1938, debutó en el Turismo Carretera, compitiendo con un Ford V8. En 1940, compitió con Chevrolet, ganando el Campeonato Internacional de Grandes Premios y se dedicó al Turismo Carretera argentino convirtiéndose en su campeón, título que defendió con éxito un año después. A continuación, Fangio compitió en Europa entre 1947 y 1949, donde consiguió nuevos éxitos.
Ganó el Campeonato Mundial de Pilotos en cinco ocasiones -un récord que se mantuvo durante 46 años hasta que fue batido por Michael Schumacher- con cuatro equipos diferentes (Alfa Romeo, Ferrari, Mercedes-Benz y Maserati), una hazaña que no se ha vuelto a repetir. Posee el mayor porcentaje de victorias en la Fórmula 1, con un 46,15%, ganando 24 de las 52 carreras de Fórmula 1 en las que participó[4]. Fangio es el único piloto argentino que ha ganado el Gran Premio de Argentina, que ganó cuatro veces en su carrera, más que ningún otro piloto[5].
Juan manuel fangio ii
Juan Manuel Fangio (FANGE-ee-oh; nacido el 24 de junio de 1911 en Balcarce, provincia de Buenos Aires, Argentina – fallecido el 17 de julio de 1995 en Buenos Aires, Argentina), apodado El Chueco o El Maestro, fue un piloto de carreras argentino que dominó la primera década de las carreras de Fórmula Uno. Ganó cinco Campeonatos del Mundo de Pilotos de Fórmula Uno -un récord que se mantuvo durante 46 años hasta que fue superado por Michael Schumacher- con cuatro equipos diferentes (Alfa Romeo, Ferrari, Mercedes-Benz y Maserati), una hazaña que no se ha vuelto a repetir. Muchos le siguen considerando el mejor piloto de todos los tiempos[1].
Fangio nació el día de San Juan de 1911 en Balcarce, hijo de inmigrantes italianos.[2] Comenzó su carrera de piloto en Argentina en 1934, conduciendo un Ford Modelo A de 1929 que había reconstruido.[3] Durante su época de piloto en Argentina, condujo coches Chevrolet y fue Campeón Nacional Argentino en 1940 y 1941.[3] Vino por primera vez a Europa a correr en 1948, financiado por el Automóvil Club Argentino y el gobierno argentino.[3]
La muerte de Fangio
Tras un año de descanso, el nómada Gran Premio de Europa regresó en el familiar escenario de Nurburgring, en Alemania. Aunque Juan Manuel Fangio ganó la carrera, el fin de semana se vio ensombrecido por la muerte del argentino Onofre Marimon durante los entrenamientos.
Marimón había conducido con Fangio para Maserati y, como hijo de uno de sus grandes amigos, Fangio le había tomado bajo su tutela cuando empezó. El jueves perdió el control en una curva, atravesó un seto y chocó contra un árbol. Murió en el acto. Fangio, consternado, se dirigió al lugar del accidente y comprobó los restos del coche de Marimón. Lo encontró atascado en la cuarta marcha, aunque estimaba que la curva debía tomarse en tercera: fue un error del piloto.
En la vigésimo segunda vuelta, González, aún afectado por la muerte de Marimón, entró en boxes y Hawthorn, que acababa de llegar a los mismos tras regresar de su propio vehículo abandonado, saltó para sustituirle. Inmediatamente contraatacó, pasando a Kling y comiendo la ventaja de Fangio hasta que fue frenado por un fuerte chaparrón.