Vestigios de los Cantares de Gesta en la narración alfonsina del
El Cantar de mio Cid (o El Poema de mio Cid) es el poema épico castellano más antiguo que se conserva,[1] basado en una historia real, que narra la historia del héroe castellano El Cid, y que tiene lugar durante la Reconquista.
El medievalista español Ramón Menéndez Pidal incluyó el Cantar de mio Cid en la tradición popular que denominó mester de juglaría. El mester de juglaría se refiere a la tradición medieval según la cual los poemas populares se transmitían de generación en generación, modificándose en el proceso. Estos poemas estaban destinados a ser representados en público por juglares, que interpretaban la composición tradicional de forma diferente según el contexto de la representación, a veces añadiendo sus propios giros a los poemas épicos que contaban, o abreviándolos según la situación.
Por otro lado, algunos críticos (conocidos como individualistas) creen que El Cantar de mio Cid fue compuesto por un tal Per Abbad (en inglés, Abbot Peter[3]), que aparece acreditado como escritor de la obra en un colofón del texto. Se ha sugerido que el poema, escrito en castellano antiguo, es un ejemplo de la poesía culta que se cultivaba en los monasterios y otros centros de erudición.
Cantares de Gesta
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Menor importancia tuvieron el Mainete, el Cantar del Cerco de Zamora y otros. Sin embargo, sólo se han conservado por escrito el Cantar de Mio Cid, el Cantar de Rodrigo y algunos versos del Cantar de Roncesvalles. Los filólogos han reconstruido otros pasajes de la epopeya castellana perdida a partir de fragmentos mal prosificados en las crónicas, donde sirvieron de fuentes de información.
Cantares de Gesta
El Cantar de mio Cid o El Poema del Cid no sólo es “el poema épico castellano más antiguo que se conserva” sino que también “se considera una epopeya nacional de España”. El texto puede datar del siglo XII o principios del XIII, pero Wikipedia también nos dice que “La fecha y la autoría aún están abiertas a debate.”
Curiosamente, el artículo de la Wikipedia en español “Cantar de mio Cid” no afirma que este texto sea una epopeya nacional. (Y a diferencia de la Wikipedia inglesa, la Wikipedia española no tiene un artículo sobre epopeyas nacionales).
y la de Castilla. – Por tanto, España sucede a Castilla, como Castilla había sucedido a León y Asturias. Hoy tengo la agradable tarea de demostrar que esto es así, y de responder a los críticos franceses, que se atreven a cuestionar la originalidad nacional, de esta creación épica de la musa popular española.
Cantares de gesta 2
Ambas partes no están simplemente en yuxtaposición, sino estrechamente entrelazadas. Esta vinculación se debe a las evidentes pero indirectas relaciones causales entre ambas tramas. En efecto, los hechos del Cid, que le permiten reconciliarse con el rey, son también los que inspiran a los delfines de Carrión a casarse con sus hijas. De hecho, el rey sólo se decide a perdonarle al conocer sus planes, quizá porque garantizan que su visión personal sea compartida por la corte. En esta situación, el rey promueve estas bodas creyendo que serán en beneficio del Cid, en vista del gran linaje de sus futuros yernos. Por otra parte, al principio del poema, el héroe (padre ejemplar y valiente guerrero) plantea como uno de sus principales objetivos un matrimonio adecuado para sus hijas, que se ve bloqueado por su destierro.
Esta sabia actitud, que también es patente en la primera parte, cuando el héroe, aunque en el exilio, se comporta lealmente en lugar de rebelarse contra el rey, se debe a uno de los rasgos básicos del comportamiento del Cid en este poema: su discreción. El otro es, por supuesto, su habilidad militar. De este modo, el héroe responde fundamentalmente a la caracterización clásica mediante “sapientia et fortitude” (sabiduría y fortaleza).