La casa de Jesús en Cafarnaún

En el Nuevo Testamento, la ciudad se describe como la casa de la infancia de Jesús,[7] y como tal es un centro de peregrinación cristiana, con muchos santuarios que conmemoran acontecimientos bíblicos. Al ser la mayor ciudad árabe de Israel, Nazaret es un centro cultural, político, religioso, económico y comercial de los ciudadanos árabes de Israel, y se convirtió también en un centro del nacionalismo árabe y palestino[8].

Otra teoría sostiene que la forma griega Ναζαρά (Nazará), utilizada en Mateo y Lucas, puede derivar de una forma aramea anterior del nombre, o de otra forma en lengua semítica[14] Si hubiera una tsade (צ) en la forma semítica original, como en las formas hebreas posteriores, normalmente se habría transcrito en griego con una sigma (σ) en lugar de una zeta (ζ). [Esto ha llevado a algunos estudiosos a cuestionar si “Nazaret” y sus cognados en el Nuevo Testamento se refieren realmente al asentamiento conocido tradicionalmente como Nazaret en la Baja Galilea[16]. Tales discrepancias lingüísticas pueden explicarse, sin embargo, por “una peculiaridad del dialecto arameo ‘palestino’ en el que un sade (ṣ) entre dos consonantes sonoras (sonantes) tendía a ser parcialmente asimilado tomando un sonido zayin (z)”[15].

La casa de Jesús en Jerusalén

La arquitectura de Palestina y del antiguo Israel abarca un vasto marco temporal histórico y una serie de estilos e influencias diferentes a lo largo de los tiempos. La arquitectura urbana de la región de Palestina anterior a 1850 era relativamente sofisticada. Aunque pertenecía al contexto geográfico y cultural más amplio del Levante y del mundo árabe, constituía una tradición distinta, “significativamente diferente de las tradiciones de Siria, Líbano o Egipto”. No obstante, la casa urbana palestina compartía las mismas concepciones básicas en cuanto a la disposición de los espacios habitables y los tipos de apartamentos que se veían en todo el Mediterráneo oriental. La rica diversidad y la unidad subyacente de la cultura arquitectónica de esta región más amplia, que se extiende desde los Balcanes hasta el norte de África, fue una función del intercambio fomentado por las caravanas de las rutas comerciales y la extensión del dominio otomano sobre la mayor parte de esta zona, desde principios del siglo XVI hasta el final de la Primera Guerra Mundial[1].

Los artefactos arqueológicos que proporcionan información sobre la naturaleza de las construcciones monumentales, como las murallas, los palacios, las tumbas y los centros de culto, en la antigua Palestina son abundantes[2]. La escasez de registros escritos, y lo incompleto de los restos arqueológicos de las antiguas viviendas palestinas a disposición de los primeros estudiosos, hizo que los arqueólogos bíblicos se fijaran a menudo en las casas palestinas modernas para determinar cómo se construían las antiguas viviendas en Palestina durante la época del Reino de Judá y el Reino de Israel (Samaria)[2]. [H. Keith Beebe, advirtiendo de que tales comparaciones no son concluyentes, escribe que “las casas árabes están estructuradas en función de costumbres sociales y condiciones económicas específicas, diferentes de las de la antigua Palestina”[2] Beebe señala que rara vez es posible hacer un recuento completo de los detalles arquitectónicos de las antiguas viviendas palestinas, pero que los registros escritos y los hallazgos arqueológicos de los que disponían los estudiosos en el momento en que escribió (1968), proporcionan “una imagen bastante fiable de las casas en la vida común de la antigua Palestina”[2].

Casas en Nazaret

Por sorprendente que parezca, se han realizado muy pocos trabajos arqueológicos en la propia Nazaret. Sin embargo, un yacimiento dentro del Convento de las Hermanas de Nazaret, al otro lado de la calle de la Iglesia de la Anunciación, puede contener algunas de las mejores pruebas de la pequeña ciudad que existía aquí en tiempos de Jesús. Aunque se conoce desde la década de 1880, nunca se había publicado adecuadamente ni había sido estudiado por arqueólogos profesionales, hasta que el Proyecto Arqueológico Nazaret comenzó a trabajar aquí en 2006.1

La historia comienza con el descubrimiento casual de una antigua cisterna en la década de 1880, 055 056 poco después de la construcción del convento. Las monjas, sus obreros e incluso los niños de su colegio emprendieron entonces las excavaciones. Se descubrió una compleja secuencia de elementos arqueológicos inusualmente bien conservados, como muros y bóvedas del periodo de las Cruzadas, una iglesia-cueva bizantina, tumbas del periodo romano y otras estructuras excavadas en la roca y construidas. Las monjas hicieron un pequeño museo con la cerámica, las monedas, el vidrio y otros artefactos portátiles que recuperaron. Después, la construcción de los nuevos edificios del convento dejó al descubierto los muros de una gran iglesia bizantina con un triple ábside, suelos de mosaico policromado y accesorios de mármol blanco, reconstruida en la época de las Cruzadas.

¿Cuándo vivió Jesús en Nazaret?

“No se va a encontrar una inscripción que diga que ésta es la casa de Jesús”, admite Ken Dark, pero el profesor de arqueología e historia de la Universidad de Reading, en Inglaterra, cree que hay argumentos de peso para la casa que ha estado estudiando durante 14 años.

La casa en cuestión, o lo que queda de ella, se encuentra debajo del convento de las Hermanas de Nazaret, en el centro de Nazaret (Israel). Está cerca de la famosa Iglesia de la Anunciación, el lugar donde muchos cristianos creen que el ángel Gabriel informó a María de que tendría un hijo.

El edificio se ha fechado en el siglo I d.C. y, según el profesor Dark, parece ser “una casa familiar típica de su época y lugar”: “No tiene nada de particular. No es lamentablemente pobre, pero tampoco hay signos de gran riqueza. Es muy corriente”, dijo a CBS News. “Si este es el entorno de la infancia de Jesús, no hay razón para creer que creció en otra cosa que no sea un hogar rural galileo muy típico de su época”.

Una, dice Dark, es la calidad de la construcción. “Quien construyó la casa sabía muy bien cómo trabajar la piedra. Eso sería coherente con el tipo de conocimiento que esperaríamos de alguien que podría llamarse tekton”, la palabra griega antigua para designar al artesano que se utilizaba para referirse a José. “Por sí mismo, eso no tiene luces intermitentes que digan, ‘aquí es donde vivió Jesús’. Pero está debajo de una iglesia bizantina del siglo V al VII”. Dark dijo que esa iglesia es “casi con toda seguridad” la descrita por un peregrino en el año 380 y conocida como la Iglesia de la Nutrición [entendida como la crianza o educación de Cristo]. El nombre proviene de la idea de que se construyó sobre una cripta que contenía la casa del joven profeta. La iglesia era enorme, estaba elaboradamente decorada y probablemente era la catedral bizantina de Nazaret. Su ubicación y grandeza indican a Dark que “este lugar en particular era considerado realmente importante”.