Liébana
Situada en el suroeste de Cantabria, España, Liébana es una comarca histórica bendecida con un clima suave y adornada con pueblos arropados por las estribaciones de la cordillera de los Picos de Europa. Aquí tiene 7 de nuestros favoritos:
Su viaje comienza en el estrecho desfiladero de la Hermida, situado como puerta norte de la región cantábrica. Los elevados acantilados de piedra caliza se elevan sobre el río Deva a ambos lados y se extienden a lo largo de 13 millas. Se hace una parada en La Hermida, el pueblo que da nombre al desfiladero. Lo que empieza como una pausa para comer se convierte en una pausa balnearia, gracias a las aguas termales naturales del pueblo. Aquí podrá descansar en un entorno natural abierto y delimitado por muros de piedra (¡como los romanos cuando habitaban La Hermida!), el pueblo que da nombre al desfiladero. Lo que empieza como una pausa para comer se convierte en una pausa termal, gracias a las aguas termales naturales del pueblo. Aquí podrá descansar en un entorno natural abierto y delimitado por muros de piedra (¡como los romanos cuando habitaban La Hermida!).
A medida que se acerque al corazón de la región, se adentrará en la zona dominada por los viñedos. Gracias a un microclima resultante de las montañas, en esta región abundan las vides, los olivos y los alcornoques.
España verde
Bárcena Mayor es un pueblo enclavado en las montañas de Cantabria, España, en el municipio de Los Tojos, y es el único pueblo residencial dentro de la Reserva del Saja en la comunidad de los valles del Saja y del Nansa.
En el pueblo se puede encontrar una antigua calzada romana[3] que ha estado en uso continuo durante casi dos milenios. Las casas y edificios son ejemplos de la construcción rural medieval de montaña en piedra con balcones y ventanas de madera.
Para aprovechar al máximo el efecto calorífico del sol, la mayoría de los edificios están orientados al sur. En el pueblo hay lavanderías históricas en la plaza pública, panaderías, graneros, establos, carpinterías, tiendas de regalos y restaurantes. Se puede oír al ganado local en sus pastos haciendo sonar las campanas que llevan colgadas del cuello mientras pastan. La arquitectura muestra formas tempranas del trabajo en madera que se convirtió en una faceta distintiva de la arquitectura cántabra, el balcón de madera. Además de los balcones, los artesanos locales de la madera producen yugos para el ganado, sandalias, bastones y cubiertos que son distintivos de la Cantabria rural.
Potes
De Bárcena Mayor, sólo podemos decir que es uno de esos lugares mágicos y sorprendentes, ya que estando en uno de los valles más inaccesibles de la Cordillera Cantábrica, está considerado como uno de los más antiguos de Cantabria e incluso de España.
Esta villa medieval, tiene mucha leyenda, aromas y tradición, por lo que su encanto nos atrapa, ya que se sigue viviendo al ritmo de las cosechas y las estaciones. Su arquitectura, muy bien conservada, se integra en la vida cotidiana de sus escasos habitantes.
Este magnífico pueblo se encuentra en el Valle de Cabuérniga, entre los ríos Sajas y Arzonzas, enclavado en el Parque Natural del Saja Besaya, que ofrece al viajero la posibilidad de pasear por sus estrechas callejuelas y descubrir su fascinante arquitectura.
Como el tiempo parece haberse detenido en este bello lugar, es importante saber que hay que dejar el coche en los aparcamientos justo antes de entrar, para poder desplazarse sin problemas y con comodidad, motivado porque el pueblo es todo peatonal.
Santander España
¿Quién dice que Santander no es una ciudad bonita? Llamado así en honor al escritor cántabro del siglo XIX José María de Pereda y extendiéndose hacia el oeste desde el puerto deportivo de Puerto Chico, pasando por grandes edificios con balcones acristalados, el bonito Paseo de Pereda es uno de mis lugares favoritos de Santander, y de todos los demás. Las parejas se divierten, los paseantes se entretienen, los corredores pasan a toda velocidad y la bahía brilla en la distancia. No pierdas de vista las curiosas estatuas de los Raqueros, que conmemoran a los niños pobres que se zambullían en la bahía en busca de monedas, ni el imponente edificio del Banco Santander, del siglo XIX. Frente a los encantadores jardines adyacentes de Jardines de Pereda se encuentra el ultracontemporáneo y esperado Centro Botín de arte y cultura, diseñado por Renzo Piano y que, en el momento de escribir este artículo, se inaugurará finalmente a finales de junio de 2017. Párate a tomar un café en una de las animadas cafeterías que bordean el paseo marítimo (el Café Suizo es uno de los más antiguos de la ciudad) o toma un cucurucho de delicias frescas en la querida heladería cántabra Regma.