Las Batuecas
Parque Natural de las Batuecas – Sierra de FranciaSituaciónCastilla y León, Salamanca, EspañaÁrea323 km2 (125 millas cuadradas)Creado11 de julio de 2000Organismo rectorReserva de la Naturaleza Reserva de la Biosfera SPA ES4150005 LIC ES4150107Sitio webwww.patrimonionatural.org/ren.php?espacio_id=8
El Parque Natural de las Batuecas – Sierra de Francia es un espacio natural protegido situado en el oeste de España y en particular en el suroeste de la región de Salamanca. En la comunidad autónoma de Castilla y León, en el límite con Extremadura[1][2].
El parque cubre una amplia zona que abarca parte de la Sierra de Francia y el valle de las Batuecas en su interior, lugar que también da nombre al parque. En este lugar se encuentra la mayor parte de la fauna y flora de la zona, y en él se pueden observar algunas de las más singulares biodiversidades españolas.
La cigüeña negra es la joya del parque, y cuenta con una pequeña colonia que tiene un valor esencial por ser puente entre las poblaciones existentes en el Parque Natural Arribes del Duero y las que viven en Extremadura. Otras aves presentes en el parque son el cuco común, la perdiz roja, la paloma torcaz, la tórtola europea, el petirrojo europeo, el escribano de caña, el mirlo común, el alcaudón ibérico, la lavandera gris y blanca y el herrerillo común[3].
Audiovisual: Las Batuecas, Sierra de Francia (Parte 1/2)
La fusión de arte y naturaleza: esta es la original sugerencia que te proponemos. Se trata de una excelente manera de explorar el bello entorno natural del Parque Natural de Las Batuecas-Sierra de Francia, al sur de Salamanca, mientras a lo largo de su recorrido disfruta de espectaculares obras de arte. Estas dos rutas son una auténtica revelación.
La primera ruta, de unos siete kilómetros, es circular y tiene una duración de dos horas: la ‘Ruta del Agua’. Se trata de un camino que une las localidades de Mogarraz y Monforte. Estos paisajes presentan una atractiva combinación de vegetación con el telón de fondo de las aguas borboteantes de los ríos y arroyos. También le espera una agradable sorpresa:
a lo largo del camino encontrará seis esculturas, totalmente integradas en el entorno. Todas estas obras son muy sutiles y han sido creadas por jóvenes artistas que buscan nuevos lenguajes plásticos. Mientras te detienes a admirar el valle o a contemplar la puesta de sol, te sorprenderá una gran jaula, una sirena mágica que se “hunde” en una roca, o siete sillas de diferentes tamaños en medio de un bosque, que parecen imágenes de un cuento de hadas…
Espacios Naturales: Sierra de Francia, Las Batuecas (Parte
Toda la zona tiene un gran valor paisajístico y ecológico con abundante fauna y flora junto con una gran riqueza cultural y un importante patrimonio histórico-artístico. Hay cinco municipios en la zona declarados “Conjunto Histórico-Artístico” debido a la riqueza de pinturas rupestres, restos de minas romanas, ermitas y monasterios que se encuentran dispersos por la zona.
En las cotas más altas, la vegetación ha tenido que adaptarse a la dureza del clima azotado por el viento y está dominada por la retama y la “zona de los erizos” (arbustos espinosos de baja altura). A medida que se desciende, aparecen especies como el acebo y los bosques de castaños, robles y abedules. En los terrenos orientados al sur hay encinas, alcornoques, madroños y jaras, mientras que en las zonas resguardadas y soleadas hay huertos de castaños, almendros, viñedos y olivares.
Entre los mamíferos que habitan el Parque Natural de Las Batuecas-Sierra de Francia se encuentran el lince ibérico, el tejón, la cabra montés, el gato montés, el meloncillo, la marta, el desmán ibérico y la nutria, así como el corzo, el ciervo y el jabalí.
TRES VALLES – Sierra de Francia – Las Batuecas
Las Batuecas es un valle mágico, situado en el sur de la provincia, cerca de La Alberca. Por el hecho de ser una zona intrincada rodeada por las montañas de la Sierra de Francia, Las Batuecas es el refugio de la fauna local y de algunos ermitaños. Lope de Vega lo llamó “el lugar de la felicidad eterna”.
En medio de este valle se encuentra el Monasterio Carmelita del Desierto de San José, fundado en el siglo XVI y recientemente restaurado. Ofrece alojamiento para aquellos que buscan periodos de tranquilidad en solitario.
Los coches pueden aparcarse en un aparcamiento situado a 500 metros del convento. Tras cruzar las aguas cristalinas del río Batuecas, una pasarela lleva al visitante hasta el monasterio y remonta el río para llegar a las fascinantes pinturas rupestres, conservadas en algunas rocas y “canchales”.
La cabra montés es la dueña de las cumbres de esta zona, declarada Reserva Nacional de Caza. También podemos ver buitres negros y buitres leonados, águilas reales, halcones peregrinos o búhos reales.